Quien hubiera imaginado que reciclar
bolsas plásticas ayudaría a salvar a los titíes cabeciblancos! Pues así es; nuestro
programa de eco-mochilas, no solo ha empoderado a muchas mujeres que se han
convertido en empresarias y líderes en conservación en sus comunidades, sino
que también ha ayudado directamente a estas comunidades a reducir la necesidad
de consumir productos del bosque como medio de subsistencia.
Solo hay que preguntarle a Ana Isabel
Arroyo, cómo su familia se ha beneficiado con éste programa y cómo es ahora su
compromiso con la conservación de los titíes.
Ana solía vivir con su esposo y 3 hijos
en una alcoba en casa de su madre. Hoy, acaba de instalar el piso de su nueva
casa de 3 alcobas, que terminó de construir hace tres años, con los ahorros
generados por la venta de las eco-mochilas.
Ana creció, con sus 5 hermanos y sus
padres, en el Caserío de Los Límites, y aún cuando su comunidad estaba bien
cerca del bosque, nunca había oído hablar de los titíes cabeciblancos. Sin
embargo, Ana con su gran natural, fue una de las primeras que se inscribió cuando
el Proyecto Tití llegó a Los Límites a enseñar a tejer con bolsas plásticas
recicladas. No solo aprendió esta técnica de tejido, sino que también aprendió
como este trabajo ayudaba a la conservación de los titíes. En vez de tener que
seguir usando recursos del bosque para subsistir, ella podría usar el dinero de
la venta de las eco-mochilas para comprar lo que su familia necesitara.
Diez años después, Ana es la Presidente
de ASOARTESANAS, una cooperativa de cerca de 40
artesanas
que hacen y venden eco-mochilas para ayudar a mantener a sus familias, al
tiempo que ayudan a la protección de los titíes cabeciblancos y del bosque.
Ana ha viajado a muchos lugares en Colombia,
compartiendo su experiencia y entrenando a más de 300 mujeres en el arte de
tejido de estas hermosas artesanías de bolsas recicladas. Su pasión por la
creación de hermosas eco-mochilas solo se compara con su dedicación para
compartir y enseñar a otros sobre cómo proteger a los titíes. Ella se sintió
muy orgullosa de representar a ASOARTESANAS en la Cumbre de Río+20 en Río de
Janeiro (Brasil) en la que recibió el prestigioso Premio Ecuatorial otorgado
por el PNUD, en nombre de todas sus compañeras.
Digna empresaria que es, Ana y el
Consejo Directivo de ASOARTESANAS, continúan invirtiendo en otros negocios, gracias
a la forma responsable como han manejado sus ingresos. Con una parte de sus
ganancias crearon un negocio de producción de leche, la cual venden en su
comunidad a un precio más cómodo para todos. Pronto empezarán un pequeño
negocio avícola orgánico para producir huevos y carne de pollo para la venta.
El futuro es muy prometedor para Ana y
su familia. Yeraldine, su hija mayor de 16 años, y quien fue la primera Reina
del Tití en el 2007, terminó el bachillerato el año pasado y ahora estudia
construcción arquitectónica en el SENA de Barranquilla. Su hijo Jeiner, de 12
años, sueña con ser Biólogo o Policía, y Andrea, de 7 años, quiere ir con su mamá
a visitar Bogotá, la capital de Colombia.
Y Ana tampoco deja de
soñar…ahora está decidida a aprender inglés para poder viajar fuera de su país
y compartir tu historia con muchas otras mujeres alrededor del mundo!
“Nunca hubiera imaginado que, gracias a los
titíes,
tendría la
oportunidad de generar un ingreso par mi familia y además ayudar a proteger el
patrimonio natural de mi país”, dice Ana. “Las eco-mochilas han cambiado mi
vida y estoy muy orgullosa de ver nuestros productos venderse en muchos otros
países. Ahora el mundo puede ver cómo nosotras ayudamos a proteger a este
increíble primate”.
Ana Isabel es una de muchas mujeres que han
podido mejorar su calidad de vida gracias al programa de las eco-mochilas,
generando ingresos sostenibles para sus familias, reduciendo la contaminación
generada por el plástico y ayudando a proteger a los bosques que los titíes
necesitan para sobrevivir. Visita
nuestro catálogo en línea http://issuu.com/fabj/docs/brochure_productos_2014
y contáctanos para hacer tu compra y así apoyes a mujeres como Ana Isabel y a la conservación
del tití cabeciblanco, en peligro crítico.
- Hemos reciclado más de 3.5 millones de
bolsas plásticas que se han convertido en hermosas eco-mochilas y
eco-brazaletes
- Se necesitan de 100 a 120 bolsas plásticas
para hacer una eco-mochila mediana y entre 3 y 4 días para tejerla a mano
- Cada eco-mochila es hecha a mano con mucha
dedicación por una de las artesanas locales. No hay dos iguales!
- Quién hizo tu eco-mochila? Mira el color
del hilo plástico de la etiqueta. Cada artesana tiene asignado un color.
- Las eco-mochilas no solo ayudan a los
titíes cabeciblancos sino también a las tortugas de mar! Entrenamos artesanas
de Costa Rica, Nicaragua, y Panamá como parte del programa de WIDECAST para
crear artículos de venta para los turistas que llegan a ver los sitios de
anidación de las tortugas de mar en estos países.
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